Se buscó una gran iluminación y ventilación, a través de la utilización de cristal, sin dejar a un lado la maravillosa vista que tiene al jardín comunal, al ser un espacio frío sobre todo en épocas de invierno se integró a la casa una chimenea ecológica que le da gran carácter a la casa. Por otro lado, se integró una cocina mexicana tradicional y los acabados que se utilizaron son muy típicos de la región como lo son la teja de barro, pisos de barro y talavera, piedra laja, columnas de cantera, entre otros, que le dan gran calidez y distinción integrándose perfectamente al entorno.